Tú puedes llegar a ser una mujer de influencia y bendecir la vida de quienes te rodean. Para ello debes despojarte de todo viso de rebeldía imperante en este mundo y sujetarte a su voluntad. ¿Cuál será el resultado de esta liberación femenina que no tiene en cuenta al Espíritu Santo?. Es hora que adquieras un compromiso real con Jesús y asumas con diligencia el llamado que Él te ha dado. Es tiempo de transformar tu manera de pensar y actuar de manera que influyas de manera positiva a esta generación.